Capadocia: Nos sentimos en una novela!

Después de visitar la principal ciudad del país fuimos a la famosa región de la Capadocia. Llegamos bien temprano y fuimos directo al hostel a dejar las cosas, vale destacar que nuestra habitación era una cueva, fue una experiencia muy diferente! Después de comer algo fuimos a mirar como despegaban los globos aerostáticos, la verdad fue algo espectacular. El resto de la mañana nos dedicamos a tomar terere con Joseto y Chili.

Decidimos visitar la ciudad de Derinkuyu, es una ciudad subterránea, o mejor dicho lo que queda de ella. La verdad fue bien interesante ver como se ingeniaba la gente para sobrevivir a las condiciones adversas, sea evitando persecuciones, calor o frío extremo, etc. También aprovechamos para visitar el Ihlara valley y el monasterio de Selime, en ninguno de los dos quisimos pagar la entrada, entonces aprovechamos solo lo que era gratis. Para terminar fuimos al valle de la hadas, que es un lugar lleno de formaciones rocosas que parecen conos gigantes. Terminamos el día viendo el atardecer por el camino y cenando por el camino. Al día siguiente nos tocaba volar en un globo aerostático.

Vimos la ciudad desde lo alto y encima con el amanecer de fondo, una experiencia única! Habría que repetirla en el invierno para tener la chance de ver la región cubierta de nieve. Para continuar el día fuimos a visitar da región de Uchisar, visitamos el castillo y aprovechamos para disfrutar de las vistas desde lo alto. Luego fuimos a almorzar y aprovechamos para tomar un jugo, o algo así, de remolacha. El veredicto fue: Horrible, parecía vinagre! pero valió la experiencia, intentamos ser locales y no nos salió jajajaja.

También aprovechamos para visitar el valle Devrent, valle del amor, Padhabagi Fairy chimneys y un lugar llamado las tres bellezas. Todas las formaciones son bien diferentes, especialmente para nosotros. Para terminar nuestro día de una forma excelente fuimos a cenar y luego a ver las estrellas en las afueras de la ciudad, vimos 4 estrellas fugaces! O sea, después de eso volvimos muy felices a descansar, al día siguiente nos tocaba ir a Pamukkale.